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Encuentros Diarios
Septiembre 16, 2019
Dichosos Los Que Lloran – Primera Parte
“Dichosos
los que lloran, porque serán consolados.”1
El
perder a alguien es difĂcil. Punto. Es un proceso de emociones que necesitamos
sentir. Seguido recibimos comentarios como, “Esta en mejor lugar”, “ConfĂa en
Dios”, “Ya no esta sufriendo”, “Ten Fe”, “Se fuerte”, y otros similares. ¿Nuestro
luto significa que no confiamos en Dios o que nuestra fe esta débil? Los
prĂłximos dĂas veremos ejemplos de la Biblia en cuanto a este tema. Comenzare
con un poco de mi historia.
En
Abril 2019, nuestro bebe, ElĂas, muriĂł en el vientre debido a un defecto
cromosĂłmica llamada TrisomĂa 18 que al poco tiempo tambiĂ©n causo un defecto
llamada Exencefalia. Nunca habĂa escuchado estos tĂ©rminos y aprendĂ que son
defectos poco comunes. Uno de cada 40,000 embarazos es afectado. Si usted
tampoco ha escuchado estos tĂ©rminos, TrisomĂa 18 es tener un tercer cromosoma
18. Es uno de los dos defectos cromosĂłmicos que terminan en muerte. Exencefalia
significa que el cerebro esta presente, pero el cráneo no se forma. Recibimos esta
diagnosis cuando tenĂa dos meses de embarazo. El aborto fue sugerido, pero
decidimos cargar a nuestro bebe por el tiempo que Dios nos permitiera. Dios da
la vida y solo El es digno de quitarla. Tenia cinco meses de embarazo cuando el
corazĂłn de ElĂas dejo de latir. Me indujeron el parto esa semana y pudimos ver
a nuestro bebe. Aunque ya no tenia vida, fue especial ver a este bebe precioso.
El
proceso desde que nos dieron la diagnosis fue difĂcil y estábamos sobrecargados
de emociones y preguntas. Aun más difĂcil fue explicarles a nuestros otros dos
hijos pequeños que su hermanito se habĂa ido al cielo. Familia y amigos venĂan
de visita y a veces decĂan, “Ten fe”. Recuerdo haberme sentido tan molesta al
escuchar esto, no por las palabras en sĂ, sino porque quizá ellos no sabĂan que
yo estaba agarrada de Dios con toda la fuerza que me quedaba y que cada onza de
fe y esperanza que tenia en mi ser estaba solamente en nuestro Dios. ÂżQuisieron
lastimarme con estas palabras? ¡No, al contrario! Solo deseaban decir algo que
nos diera esperanza en nuestro dolor. Yo no tenia el control y sabia que Dios
pudiera haber hecho un milagro al traer sanidad a nuestro bebe si fuese SU
voluntad. Cuando vi el cuerpo de ElĂas ya sin vida a travĂ©s de un ultrasonido a
los cinco meses de embarazo, sentĂ tantas emociones diferentes y no podĂa
controlar mis lágrimas, pero aun sentĂa paz. Mi corazĂłn estaba roto, pero estaba
agradecida con Dios por este bebe que me habĂa tocado la vida para siempre. Los
doctores habĂan dicho que morirĂa poco despuĂ©s de la diagnosis, pero ElĂas
lucho. Durante ultrasonidos el pateaba y se movĂa. Mas que nada, yo estaba
agradecida que Dios me habĂa elegido para ser la mama de este hermoso bebe.
Durante
una de las tantas noches que lloraba hasta quedarme dormida, empecé a creer que
quizá no deberĂa estar tan triste si tenĂa fe. En ese momento, Dios me recordĂł
de Job. Esa noche me pude identificar con Job y ver la historia de una manera
diferente.
Mañana
veremos algunas cosas de la historia de Job mientras el se encontraba en luto.
OraciĂłn
sugerida: “Querido Dios, dame tu corazón y permite que sea tus manos de
consuelo a los que están sufriendo. Que mis palabras sean tus palabras; llenas
de compasiĂłn y esperanza. Gracias por escuchar y responder a mi oraciĂłn. Te
agradezco. En el nombre de Jesús, amen.”
1.
Mateo 5:4 (NVI).
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