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Encuentros Diarios

Agosto 19, 2024

"No solo escuchen la palabra de Dios; tienen que ponerla en práctica. De lo contrario, solamente se engañan a sí mismos. Pues si escuchas la palabra, pero no la obedeces, sería como ver tu cara en un espejo; te ves a ti mismo, luego te alejas y te olvidas como eres."¹

Un hombre que entró tarde a la iglesia un día le preguntó a uno de los ujieres: "¿Ya está terminado el sermón?" El ujier respondió: "El sermón ha sido predicado, pero aún no se ha hecho".

¡Qué gran respuesta fue esta! La Palabra de Dios no está destinada sólo a ser predicada a nosotros domingo tras domingo. Está destinado a hacerse viviéndolo a diario. Una vez que escuchamos la Palabra de Dios, somos responsables de hacer lo que Dios nos está pidiendo que hagamos.

A menudo me encuentro con otros creyentes que pasan incontables horas escuchando sermones y Biblias audibles porque quieren saber más. Critican a otros que no pasan cada minuto aprendiendo de la Palabra de Dios, y les resulta fácil basar la fe de una persona, y la salvación, en cuánto "saben" de la Biblia.

Si bien es extremadamente importante leer y meditar en la Palabra de Dios para crecer en la fe y profundizar en nuestra relación con Cristo, pero esa es solo la primera parte de lo que se supone que debemos hacer. La escritura de hoy lo dice claramente: "No solo escuchen la Palabra de Dios. Tienen que ponerla en PRACTICA." Puedes tener cientos de versículos memorizados, pero si no puedes amar a tu prójimo, es en vano. Puedes escuchar sermones todo el día, pero si tu corazón está lleno de orgullo, tu ministerio a los demás será limitado porque no eres capaz de practicar todo lo que has escuchado.

No tienes que ser un erudito de la Biblia para ser usado por Dios. Él está buscando personas que estén dispuestas a entregarse y someterse a Su voluntad. Él está buscando corazones llenos de humildad, misericordia y amor. Él está buscando personas que quieran ser usadas, no por lo que saben, sino por lo que Dios puede hacer a través de ellas.

Si conoces un versículo, ¡genial! Ponlo en práctica y pasa al siguiente versículo. Si conoces cada parábola de la Biblia de memoria, ¡eso es increíble! Ve y haz lo que Jesús hizo. Nuestro éxito en la obra de Dios no está determinado por nuestro conocimiento humano, sino más bien por nuestra capacidad de escuchar y hacer. La obediencia a Dios abrirá las puertas a oportunidades inimaginables.

Oración sugerida: Querido Dios, quiero ser usado por ti. Ayúdame a poner en práctica todo lo que he aprendido de tu Palabra. Por favor, dame un corazón humilde y moldealo como mejor te parezca. Que mi ministerio a los demás se base en acciones, no solo en palabras o conocimiento humano. Gracias por elegirme para ser parte del trabajo que estás haciendo aquí en la tierra. En el nombre de Jesús, Amén.

1. Santiago 1:22-24 (NTV).