Encuentros Diarios
Febrero 04, 2025
Mala compañÃa
"No se dejen engañar: ‘Las malas compañÃas corrompen las buenas
costumbres’".1
El apóstol Pablo fue un ejemplo asombroso de lo que parece defender la
verdad, a pesar de la oposición. En el pasaje de hoy, su pasión por el
evangelio es evidente cuando una vez más le recuerda al pueblo de Corinto la
verdad del evangelio. Les advierte que "no se dejen engañar" por
personas que quieran convencerlos de lo contrario.
Hoy en dÃa, necesitamos escuchar la misma advertencia, ya que estamos
constantemente rodeados de una multitud de opiniones diferentes y verdades
autoproclamadas. Incluso dentro de nuestros cÃrculos de amistad, podemos
enfrentar la tentación de vacilar en nuestra fe y ser engañados. No se puede
negar que las amistades son una parte importante de la vida. Somos seres
relacionales y Dios no quiere que estemos solos. Sin embargo, también debemos
buscar la sabidurÃa de Dios al elegir a nuestros amigos y pedirle que ponga a
las personas correctas en nuestros caminos. ¿Significa esto que solo debemos
tratar de hacernos amigos de personas de ideas similares? No necesariamente.
Tener opiniones diferentes con los demás permite el crecimiento y las
oportunidades para practicar hablar la verdad en amor. La forma en que
respondemos a situaciones difÃciles puede ser un gran testimonio para otros de
nuestra fe. El problema surge cuando, en lugar de ser un ejemplo para otros de
Cristo, nos influyen para ir en contra de lo que sabemos que es verdad.
William Gladstone dijo: "Elige sabiamente a tus compañeros, porque
los compañeros de un joven, más que su comida o ropa, su hogar o sus padres, forman
quien es". Si bien muchos de nosotros podemos haber recibido consejos y
educación piadosa en nuestros hogares mientras crecÃamos, pero también hemos
visto cómo esa base puede ser corrompida por las influencias que permitimos en
nuestras vidas.
Elijamos ser un amigo que motive a otros a seguir la verdad, amar a
Jesús y glorificarlo con sus decisiones. Entonces pidámosle a Dios que
proporcione amigos que nos ayuden a hacer lo mismo.
Oración sugerida: Querido Dios, gracias por el regalo de las amistades.
Oro para que me ayudes a defender Tu verdad y animar a otros a hacer lo mismo.
Ayúdame a ser un amigo que ayudará a otros a acercarse a ti y motivarlos a
cumplir el propósito que tienes para ellos. GuÃame, también, a amigos que harán
lo mismo por mÃ. Gracias por escuchar y contestar mi oración. En el nombre de
Jesús, amén.
1 Corintios 15:33 (NVI).
El Encuentro de hoy fue escrito por: Crystal B.
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