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Diciembre 11, 2024

"Por lo tanto, no desechen la firme confianza que tienen en el Señor. ¡Tengan presente la gran recompensa que les traerá! Perseverar con paciencia es lo que necesitan ahora para seguir haciendo la voluntad de Dios. Entonces recibirán todo lo que él ha prometido."¹

No sé ustedes, pero no soy buena para estar quieta y esperando. ¡Me gusta ser un "participante activo" que trata de hacer que las cosas sucedan más rápido! Entonces, cuando suceden cosas en mi vida donde literalmente no hay nada que pueda hacer para acelerar el proceso o arreglar la situación, sé que es la forma en que Dios me recuerda suavemente que Él lo tiene todo bajo control. Él está trabajando de maneras que yo no puedo ver, y necesito confiar y tener paciencia en el proceso. Leí lo siguiente sobre la paciencia hace un tiempo, y realmente ha sido un gran recordatorio durante los momentos en que me impaciento.

La paciencia es:

1. la capacidad de sentarse y esperar un resultado esperado sin experimentar ansiedad, tensión o frustración.

2. la capacidad de dejar de lado su necesidad de gratificación inmediata y estar dispuesto a esperar.

3. el rasgo que muestra tolerancia, compasión, comprensión y aceptación hacia aquellos que son más lentos que tú en el desarrollo de la madurez, la libertad emocional y las habilidades de afrontamiento.

4. la capacidad de mantener la calma en medio de la agitación porque sabes que Dios tiene el control.

Cuando surjan situaciones inesperadas en tu vida, sé intencional y tómate un momento para pensar en lo que Dios quiere crecer en ti a través de ella. Para mí, la perseverancia paciente es a menudo lo que necesito para crecer a través de circunstancias difíciles. Mi trabajo es ser fiel con lo que Dios me ha dado para hacer y dejar que él se encargue del resto.

Oración sugerida: Querido Dios, gracias por las situaciones que permites en mi vida para ayudarme a crecer para ser más como tú. No tengo que preocuparme porque siempre tienes el control. Aun cuando es difícil o no entiendo el resultado, confío en que siempre eres bueno y te preocupas por mí. Gracias por escuchar y contestar mi oración. En el nombre de Jesús, amén.

1. Hebreos 10:35-36 (NTV).

El Encuentro de hoy fue escrito por: Crystal B.