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Febrero 20, 2023

"Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lazaro.â€�¹

"Al ver llorar a María y a los judíos que la habían acompañado, Jesús se turbo y se conmovió profundamente. ‘¿Dónde lo han puesto?’ pregunto. ‘Ven a verlo, Señor’ le respondieron. Jesús lloro. ‘¡Miren cuanto lo quería!’ dijeron los judios.'"²

Las relaciones eran, y siguen siendo, importantes para Jesús. Durante su tiempo en la tierra, estuvo constantemente en conexión con las personas que lo rodeaban, pero tenía amistades especiales de las que también habla la Biblia, en las que invirtió tiempo de calidad. Este fue el caso de sus amigos, Marta, María y Lázaro. Estos hermanos vivían en Betania, y eran discípulos de Jesús. Como se menciona en las Escrituras de hoy, ¡Jesús los amaba y los recuerdos que crearían juntos serían inolvidables!

Marta y María tuvieron el privilegio de experimentar la gracia de Dios y el amor incondicional de primera mano, que era algo que no muchas mujeres experimentaban en esos días. Cuando Jesús los visitaba, María era la primera en sentarse a sus pies y aunque el don de hospitalidad de Marta a veces le hizo perder de vista las cosas importantes, los momentos que Jesús pasó con sus amigos fueron especiales para todos.

Cuando Lázaro cayó enfermo, sus hermanas rápidamente enviaron un mensaje a Jesús diciendo: "Señor, el que amas está enfermo", sin embargo, Jesús iba a usar esto para la gloria de Dios. La muerte y resurrección de Lázaro iba a ser utilizada para llevar a muchos a una relación personal con Jesús. Aunque Jesús conocía el plan más grande con la enfermedad y muerte de Lázaro, María y Marta no lo sabían en ese momento, por lo que la tristeza y el dolor que sentían era real. Cuando Jesús llegó y vio a sus amigas llorando, compartió su dolor y lloró con ellas. Su compasión por sus amigos era tangible, y eso era un testimonio de su amor a los que miraban.

Como cristianos, sabemos que todo en nuestras vidas sucede como parte del plan más grande de Dios para nosotros. Puede ser doloroso en el momento, pero Dios puede usar nuestro dolor para algo más grande cuando se lo permitimos. Esta es nuestra esperanza, y es lo que debemos esforzarnos por compartir con nuestros amigos también. El amor que mostramos a los demás, especialmente en tiempos de sufrimiento, puede ser el mayor testimonio de quién es Jesús y de nuestra relación con Él.

Oración sugerida: Querido Dios, ayúdame a ser un canal de tu amor a mis amigos y a todos aquellos que pones en mi camino. Incluso en tiempos de dolor, que mi fe y esperanza en ti atraigan a otros a una relación personal contigo. Gracias por escuchar y contestar mi oración. En el nombre de Jesús, amén.

1.    Juan 11:5 (NVI).

2.    Juan 11:33–36 (NVI).

El Encuentro de hoy fue escrito por: Crystal B.