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Abril 05, 2023

¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor! Alaben a Dios en su santuario, alábenlo en su poderoso firmamento. Alábenlo por sus proezas, alábenlo por su inmensa grandeza.

Alábenlo con sonido de trompeta, alábenlo con el arpa y la lira. Alábenlo con panderos y danzas, alábenlo con cuerdas y flautas. Alábenlo con címbalos sonoros, alábenlo con címbalos resonantes.

¡Que todo lo que respira alabe al Señor! ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Senor!¹

A lo largo de esta temporada de Cuaresma, pasamos por los Salmos destacando diferentes momentos de la vida de David. Sus altibajos; momentos de cercanía con el Señor, así como algunos de sus dolores y lamentos, fueron catalogados aquí con los 150 Salmos. Sabemos que la mayoría de los Salmos fueron escritos por David mismo, incluyendo este último, que para mí resume perfectamente todos los Salmos. Aquí el mensaje del salmista es bastante claro: ¡Alabado sea el Señor! No importa cómo lo hagas, ¡solo exalta al Señor! Este Salmo no da razón ni circunstancia, lo que deja bastante claro es que no importa en qué estado nos encontremos, ¡podemos alabar!

Alabado sea Dios en Su Santuario: ¡El Santuario del Señor está dondequiera que Él esté! La presencia de Dios no se limita a iglesias y templos, ¡está en TODAS PARTES! Puedes alabarlo justo donde estás, arrodillado en tu cama o en la cima de la montaña más alta, ¡Dios está allí!

Alábenlo por Sus obras poderosas: ¿Qué ha hecho el Señor? No dice que lo alabas por las obras que Él ha hecho solo por ti, ¡así que eso hace que este versículo sea interminable! ¿Qué ha hecho el Señor? ¡TODO! ¡Solo mira a tu alrededor a la creación misma, a la humanidad, a cada detalle de nuestra existencia, y luego alábalo de acuerdo con su excelente grandeza!  

Alaba al Señor con cualquier medio posible—En los días en que se escribió este salmo, los instrumentos y las voces eran los medios elegidos, pero podrías estar diciendo, bueno, ¡no toco ningún instrumento y no puedo cantar! Afortunadamente para nosotros, hay quienes pueden y han grabado hermosas canciones de adoración para que alabemos, solo hay que hacer clic en un botón. ¡Prende esa música de adoración y canta!

¡Que todo lo que tiene aliento alabe al Señor! — ¡No puede ser más claro que eso! Si hay aliento en tus pulmones hoy, ¡tienes razones más que suficientes para alabar al Señor! Entonces, ¿qué estás esperando? ¡Respira hondo ahora mismo y ALABA AL SEÑOR!

Oración sugerida: Excelente Señor, hay innumerables cosas por las que alabarte, pero esta mañana quiero alabarte por mi salvación. Te alabo por morir en esa cruz cruel y tomar mi pecado y los pecados de este mundo de la manera más vergonzosa. Te alabo por el gran amor que me mostraste al derramar tu preciosa sangre por mí para que mi pecado pudiera ser lavado. Pero sobre todo, te alabo porque la muerte no pudo derrotarte y estás vivo, ¡oh Dios asombroso! En el nombre de Jesús, Amén.

1.    Salmo 150.

El Encuentro de hoy fue escrito por: Veronica B.