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Encuentros Diarios

Mayo 30, 2023

Al día siguiente salimos y llegamos a Cesarea, y nos hospedamos en casa de Felipe el evangelista, que era uno de los siete; este tenía cuatro hijas solteras que profetizaban.¹

Nada en la Biblia fue escrito sin ser inspirado por Dios mismo, lo que significa que Él tenía una razón para todo, y todos los mencionados en las Escrituras; aunque puedan parecer insignificantes. Mientras Jesús caminaba por esta tierra, Él personalmente habló con personas que eran consideradas insignificantes por otros, pero que eran muy importantes para nuestro Señor; Nada ni nadie pasó desapercibido. A través de todo lo que leemos en la Biblia, Dios solía transmitir Su plan de salvación, y Él nos dio historias como lecciones para que pudiéramos aprender de sus vidas.

Hemos leído acerca del ministerio de Jesús y el ministerio llevado a cabo por Sus doce discípulos. Luego, los discípulos eligieron a otros siete hombres para ayudarlos a avanzar en sus ministerios (Hechos 6). Sus historias son pocas y solo se mencionan ocasionalmente hoy. Luego nos encontramos con versículos al azar como Hechos 21:9 – Él [Felipe] tenía cuatro hijas solteras, que profetizaban – ¡y eso es todo lo que sabemos acerca de estas cuatro hijas! Sin embargo, este versículo en realidad tiene un significado mucho mayor. Estas jóvenes son cristianas de segunda generación. Su padre era un creyente que era parte de un ministerio significativo (Hechos 8) y estas cuatro hijas habían seguido los pasos de su padre. Dios tenía algo que decir para los padres que criaron a sus hijos para el Señor: "Instruye al niño en el camino que debe seguir; Incluso cuando sea viejo, no se apartará de él".² También tenía algo que decir a esos niños:

Ten cuidado de obedecer todos estos mandamientos que yo te he dado, para que siempre te vaya bien, lo mismo que a tu descendencia. Así habrás hecho lo bueno y lo recto a los ojos del Señor tu Dios.³

A estas jóvenes se les enseñó a servir al Señor y continuaron en su fe en su vida adulta. Aunque este pequeño versículo estaba escondido dentro de este capítulo, se colocó allí como un recordatorio importante para padres y madres por igual: nuestro papel es criar a nuestros hijos para el Señor, encendiendo un fuego en sus almas que permanecerá con ellos para siempre. A su vez, nuestras hijas e hijos llevarán esa antorcha promoviendo el reino de Dios.

Oración sugerida: Querido Señor, Tu Palabra contiene mucho más que solo historias y estoy muy agradecido de que el más pequeño de los versículos pueda hablarme y enseñarme. Ayúdame a ser un ejemplo fiel a mis hijos de tu gracia y amor. En el nombre de Jesús, Amén.

1.    Hechos 21:8-9.

2.    Proverbios 22:6.

3.    Deuteronomio 12:28.

El Encuentro de hoy fue escrito por: Verónica B.