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Encuentros Diarios
Agosto 07, 2023
Las consecuencias del orgullo
"Si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, y me busca y abandona su mala conducta, yo lo escuchare desde el cielo, perdonare su pecado y restaurare su tierra."1
Me encanta c贸mo el presidente Abraham Lincoln se帽al贸 a los estadounidenses que nuestro orgullo puede hacer que nuestra naci贸n sufra:
"Hemos sido los receptores de las m谩s selectas bondades del cielo; Hemos sido preservados estos muchos a帽os en paz y prosperidad; Hemos crecido en n煤mero, riqueza y poder como ninguna otra naci贸n ha crecido jam谩s. Pero nos hemos olvidado de Dios. Hemos olvidado la mano misericordiosa que nos preserv贸 en paz y nos multiplic贸, enriqueci贸 y fortaleci贸, y hemos imaginado en vano, en el enga帽o de nuestros corazones, que todas estas bendiciones fueron producidas por alguna sabidur铆a superior y virtud propia. Intoxicados con un 茅xito ininterrumpido, nos hemos vuelto demasiado autosuficientes para sentir la necesidad de redimir y preservar la gracia, demasiado orgullosos para orar al Dios que nos hizo".2
Cada vez que algo malo sucede en nuestro mundo, he escuchado a la gente usar eso como una excusa de por qu茅 no creen en Dios. Estoy seguro de que has escuchado: "Si Dios es bueno, 驴por qu茅 suceden cosas malas?" Pero hasta que las personas est茅n dispuestas a ver la ra铆z del problema, nunca lo entender谩n. Somos nosotros los que nos alejamos de Dios. Somos nosotros los que hemos desobedecido una y otra vez. Somos nosotros los que est谩bamos tan atrapados en el pecado, sin esperanza y en una necesidad desesperada de salvaci贸n. Fue por nosotros que Jes煤s muri贸 en la cruz. Cuando salimos de la protecci贸n de Dios al desobedecer Su Palabra, hay consecuencias naturales por nuestra desobediencia.
Sin embargo, en lugar de darnos cuenta de nuestra culpa, permitimos que el orgullo entre y no asumimos la responsabilidad de nuestra parte en el caos en el que se encuentra nuestro mundo. Las bendiciones de Dios siempre est谩n disponibles para Sus hijos cuando elegimos someternos a Su voluntad y caminar en obediencia a Su Palabra. Como cristianos, debemos ser los primeros en caer de rodillas en humildad y clamar a Dios por perd贸n, no solo para nosotros mismos, sino para nuestra naci贸n. Cuando Jes煤s estaba siendo crucificado, le pidi贸 a su Padre que perdonara a los que lo estaban crucificando porque no sab铆an lo que estaban haciendo (Lucas 23:34). Tenemos la certeza de que Jes煤s vendr谩 de nuevo, por lo que diariamente debemos buscar el rostro de Dios, orar por nuestra tierra y pedirle a Dios que nos use para alcanzar a tantos como sea posible con el regalo de Su salvaci贸n.
Oraci贸n sugerida: Querido Dios, nuestro mundo te necesita. Hasta que vuelvas, por favor 煤same para compartir las Buenas Nuevas con otros y vivir de tal manera que te traiga honor y gloria. Perd贸name por actuar en desobediencia a Tu Palabra. Pedimos que restaures nuestros corazones y nuestra tierra. En el nombre de Jes煤s, Am茅n.
1. 2 Cr贸nicas 7:14 (NVI).
2. A. Lincoln, Proclamaci贸n de un d铆a de humillaci贸n nacional, ayuno y oraci贸n, 1863.
El Encuentro de hoy fue escrito por: Crystal B.
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