Archivos Encuentros Diarios

Encuentros Diarios

Noviembre 09, 2023

Hombres de poca fe – contesto -, ¿Por qué tienen tanto miedo? Entonces se levantó, reprendió a los vientos y a las olas, y todo quedo completamente tranquilo.¹

La semana pasada, mientras estaba en una gasolinera, decidí pasar mi auto por su lavadora de autos. Lo he hecho muchas veces en otras gasolineras y conocía la rutina: conducir hacia adelante y estacionar el automóvil; Siéntese allí mientras la máquina hace el trabajo, luego conduzca lentamente hacia adelante cuando el semáforo se ponga verde. Sin embargo, en esta gasolinera, había asistentes que te indicaban: "Por favor, ponga su automóvil en neutral y NO pise los frenos; Mantén el volante recto". Mientras obedecía indecisa, sentí que las pistas se apoderaban de mi vehículo y lentamente comenzaba a moverlo hacia adelante, ¡solo un par de pies detrás de otro automóvil! ¡Tomo cada gramo de fuerza de voluntad para no pisar el freno! De repente, mi auto estaba cubierto de una espuma jabonosa tan espesa que estaba ciega a mi entorno. Sostuve el volante con fuerza y ore para que el conductor que iba delante de mí también no pisar el freno tampoco. Durante esos 30 segundos, cuando estuve en control de una máquina, me llené de ansiedad y dudas, olvidando que el asistente estaba observando desde afuera. Cuando el agua comenzó a lavar el jabón espeso y pude ver de nuevo, una ola de alivio me invadió. Me reí nerviosamente de mi falta de control y recordé que así es exactamente como Dios nos guía.

En el Nuevo Testamento, cuando una tormenta devastó su barco y fueron cegados por el mar embravecido, los discípulos clamaron a Jesús con miedo y llenos de ansiedad porque no podían controlar su situación. Jesús, que había estado todo el tiempo con ellos en la barca, les respondió: «¿Por qué tienen tanto miedo, hombres de poca fe?» Él les decía: "¡Estoy aquí! ¡Yo tengo el control! ¡Déjame ser tus ojos! Puedo ver las cosas mucho mejor que tú".

Para que el Señor nos limpie adecuadamente, debemos permitir que Él nos guíe, ciegamente. Es por la fe (la confianza en las cosas invisibles) que el gran poder de Dios puede ser liberado en la vida de Sus hijos. Cuando estamos llenos de temor y duda, somos incapaces de ceder a Dios el control total que Él requiere. Dios te pide que te pongas en neutral y dejes que Él tome el volante de tu vida mientras te guía en situaciones que requieren que tengas un poco de fe. Cuando hayas aprendido a confiar en que Él cuidará de ti, Él se te revelará claramente y habrás salido limpio y bendecido. Pon tu máxima confianza en el Señor Jesús y deja que otros observen a Dios obrando en ti. ¡Obedece Sus instrucciones, no importa cuán ansioso te sientas, y deja el control en manos del Padre!

Oración sugerida: Querido Señor, perdóname por tratar siempre de ver mi propio camino. Ayúdame a recordar que ya conoces el camino y solo necesito confiar en ti. Lléname de tu paz para que tenga la fe de dejarte tomar el volante. En el nombre de Jesús, Amén.

1.    Mateo 8:26 (NVI).

El Encuentro de hoy fue escrito por: Verónica B.