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Diciembre 25, 2023

¡Feliz Navidad a todos nuestros lectores! Oramos para que sus corazones se llenen de gozo y esperanza al celebrar el nacimiento de nuestro Salvador.

Porque tanto amo Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. El que cree en él no es condenado, pero el que no cree ya está condenado por no haber creído en el nombre del Hijo único de Dios.¹

Los niños (¡y algunos adultos también!) se despiertan en la mañana de Navidad y ven regalos de todas las formas y tamaños envueltos maravillosamente debajo del árbol y sus ojos se agrandan de asombro. ¡Intentan adivinar cuál de esas cajas es suya e incluso podrían tratar de ver que hay dentro de su regalo! No siempre se puede saber lo que hay dentro del regalo hasta que, por supuesto, lo desenvuelves. Y entonces, puede que no sea lo que esperabas.

Cuando el pueblo de Dios esperaba a su Salvador, su Mesías, esperaba que un rey poderoso y terrenal con una brillante corona de oro viniera saltando sobre un caballo blanco y derrotara a todos sus enemigos. No obtuvieron lo que esperaban, pero Jesús era exactamente lo que necesitaban. Jesús fue el mejor regalo que alguien podría recibir. Jesús era un niño Rey nacido en un entorno humilde. Había venido a derrotar al verdadero enemigo. Jesús vino a salvarnos de nuestro pecado y pondría el mundo patas arriba al mostrarle a la gente el amor de Dios.²

Hoy en día, muchos buscan su salvación en cajas de diferentes colores y tamaños. Rechazan el regalo humildemente envuelto que es gratuitamente suyo. Jesús no vino a nosotros envuelto en bonitos lazos, ¡pero el regalo que nos trajo es la verdadera maravilla de la Navidad! Jesús vino a traernos vida abundante y eterna en Él. ¿Qué esperas? ¡Abre el regalo! Es tuyo.

Oración sugerida: Querido Dios, gracias por el regalo que nos diste. Gracias por darnos a tu Hijo. ¡Pido por aquellos que no lo han desenvuelto para que acepten tu regalo más precioso hoy! En el nombre de Jesús, amén.

1.    Juan 3:16-18 (NVI).

2.    Extracto tomado en parte de "Un misterio de Navidad", Hillsong.com

El Encuentro de hoy fue escrito por: Verónica B.