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Encuentros Diarios
Enero 10, 2024
Oración libre de arrugas
Además, el EspÃritu Santo nos ayuda en nuestra debilidad. Por ejemplo, nosotros no sabemos que quiere Dios que le pidamos en oración, pero el EspÃritu Santo ora por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.1
Una de las tareas domésticas que menos me gusta es planchar. Cuando estaba recién casada, me gustaba planchar las camisas de mi esposo y dejarlas con un aspecto suave y ordenado. Pero, con el paso de los años, se volvió tedioso y me encontré luchando con la tarea. Un dÃa, descubrimos un vaporizador de mano para ropa. ¡Descubrà que planchar volvió a ser agradable porque el vaporizador hizo que la tarea fuera muy simple! Aunque vaporizar mi ropa sigue siendo mi método preferido de planchado, la tarea a veces requiere mucho tiempo y la mayorÃa de las veces prefiero elegir una prenda que no necesite atención. Recientemente, mi hermana me presentó un espray antiarrugas, ¡mi nuevo mejor amigo! Es ideal para la mayorÃa de los tipos de telas y todo lo que tienes que hacer es rociar la prenda, agitarla un poco y listo. ¡Planchar nunca ha sido tan fácil!
Es posible que nos encontremos viendo nuestra vida de oración de la misma manera. Cuando llegamos por primera vez a Cristo, nos dimos cuenta de que orar era agradable porque tenÃamos mucho que decirle a Dios. Nuestra condición de "recién casados" nos hizo esperar con ansias esos momentos con el Salvador y nos encontramos con más palabras que tiempo. Nuestras oraciones eran suaves y frescas todos los dÃas. Con el tiempo, es posible que hayamos descubierto que nuestro tiempo de oración se ha acortado y ahora nos encontramos con más tiempo que palabras. Cuando hacemos tiempo para hablar con el Padre, nuestras oraciones suenan confusas; a veces sin palabras. Es posible que queramos orar por los problemas de alguien y no estemos seguros de qué pedir con respecto a sus necesidades. Otras veces podemos pedir las cosas equivocadas porque no sabemos que Dios ya tiene un plan reservado para nosotros. Aquà es cuando el EspÃritu Santo viene a nuestro rescate, porque al igual que el práctico vaporizador y los aerosoles, a veces el EspÃritu Santo tiene que intervenir y liberar las arrugas de nuestras oraciones y enderezarlas antes de que lleguen al Padre. Dios desea que pasemos tiempo con Él en oración, asà que no descuides ese tiempo porque estás apurado. Dios se merece lo mejor, no busques soluciones fáciles a la oración. Dale tu tiempo, tu esfuerzo, y ven a Él con todo tu corazón. Permite que el EspÃritu Santo rocÃe tus palabras con sabidurÃa, agite un poco tus oraciones y las transmita, ordenada y suavemente, ¡directamente al corazón del Padre!
Oración sugerida: Padre Celestial, eres digno de mucho más de lo que tengo para ofrecerte, asà que te doy mi corazón. Le pido al EspÃritu Santo que habite allà y guÃe mis oraciones para que sean un olor dulce para Ti. En el nombre de Jesús. Amén.
1. Romanos 8:26 (NTV).
El Encuentro de hoy fue escrito por: Verónica B.
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