Encuentros Diarios
Junio 25, 2024
¿Soy suficiente?
“Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros se manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento. Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden; a éstos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquellos olor de vida para vida. Y para estas cosas, ¿quién es suficiente? Pues no somos como muchos, que medran falsificando la palabra de Dios, sino con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Cristo.â€1
En un momento u otro, todos nos hemos sentido insuficientes. Tal vez porque nos enfadamos con nuestro cónyuge, porque nos atrasamos en el trabajo o porque temimos aceptar una oportunidad en la iglesia. En el pasaje de hoy, Pablo hace una pregunta que apunta a esta inseguridad: "Y para estas cosas, ¿quién es suficiente? (2 Corintios 2:16).
Si bien nosotros somos insuficientes, pero Dios no lo es. Cuando confiamos en Cristo como nuestro Señor y Salvador, nos convertimos en hijos de Dios y nos otorga su justicia (Juan 1:12, 2 Corintios 5:21). Nos da poder y ha prometido llevarnos "siempre en triunfo en Cristo Jesús" (2 Corintios 2:14). Pero a menos que le creamos y obedezcamos con fe, no experimentaremos la vida que Él ha dispuesto para nosotros.
Sentirse insuficiente no es pecado, pero utilizar la insuficiencia como excusa si lo es. Cuando Dios nos llama a hacer algo que parece estar más allá de nuestras capacidades, tenemos dos opciones: podemos enfocarnos en Cristo y avanzar en triunfo, o enfocarnos en nosotros mismos y retirarnos en derrota.
En realidad, es una cuestión de fe. Dios siempre nos dará el poder para hacer lo que Él nos pida. Esto no significa que lo haremos todo perfectamente, pero cada paso de obediencia es una victoria que El bendecirá (Salmo 128:1-2).
Oración sugerida: Amado Padre Celestial, gracias por que en Jesús somos más que suficientes. Aun cuando llegue el sentimiento de insuficiencia, tu EspÃritu Santo nos recuerda amorosamente que no tenemos que hacerlo solos, que tu estas con nosotros para fortalecernos y hacer lo que tú nos pidas. Gracias en el nombre de Jesús, Amén.
1. 2 Corintios 2:14-17 (RVR1960).
El Encuentro de hoy fue escrito por: Rosina N.
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