Encuentros Diarios
Enero 31, 2025
La obediencia
FÃate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia
prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.1
La obediencia es algo curioso. La esperamos de nuestros hijos y es
esencial para el éxito en organizaciones como el ejército. Aunque, en realidad,
a nadie le gusta someter su voluntad a otra persona. Después de todo, la gente
puede fallarnos. Sin embargo, Dios nunca nos falla, y obedecerlo siempre es lo
más sabio.
Aprender a obedecer implica:
Confiar. La obediencia proviene de una base de fe, mientras que la mayor
parte de la desobediencia proviene de la falta de ella. Eso significa que
creeremos que Dios es quien dice ser, y aceptaremos sus planes, sus métodos y
su tiempo. Mostramos nuestro amor al Padre celestial viviendo de esta manera
(Juan 14:15). Recuerde: Dios se deleita en bendecir a quienes obedecen su
voluntad.
Esperar. Cuando no sabemos qué hacer, a menudo tratamos de confiar en
nuestra propia sabidurÃa, tomar una decisión y luego esperar que Dios la
bendiga. Eso no es bÃblico. Él nos ha dado su EspÃritu como nuestro maestro
porque quiere que conozcamos su mente y sus planes para nuestra vida. Debemos
esperar con confianza hasta estar seguros.
Dios asume la responsabilidad de darnos dirección. Él desea revelar cada
paso en el camino, pero debemos acudir a Él con confianza y disposición a
esperar a que nos indique el siguiente paso.
Oración sugerida: Amado Padre Celestial, enséñame a esperar en Ti.
Quiero ser obediente y someterme a Tu voluntad, aunque en ocasiones no entienda
el porqué de las cosas. Padre Amado, Tu plan para mi vida es perfecto, y todo
lo que anhela mi corazón, sucederá en Tu tiempo, de acuerdo con Tu voluntad. Oro en el nombre de
Jesús, Amen.
1. Proverbios 3:5-6 (RVR1960).
El Encuentro de hoy fue escrito por: Rosina N.
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