Encuentros Diarios
Noviembre 15, 2024
1. Estaciones
"El gran amor del Señor nunca se acaba, y su compasión
jamás se agota. Cada mañana se renuevan sus bondades; ¡muy grande es su fidelidad!"1
Me encanta el otoño. Me encanta ver las hojas cambiar
de color y el aire fresco por las mañanas. Siempre es un hermoso recordatorio
de la atención de Dios a los detalles cuando creó la tierra. Sabía que esos
hermosos detalles serían lo que necesitábamos para recordarnos de su grandeza
en momentos de incertidumbre. Con cada temporada que pasa experimentamos una
nueva belleza, y así es como es con Dios también. A medida que experimentamos
diferentes estaciones en nuestras vidas, podemos ver nuevas características de
quién es Dios y la belleza de tener una relación personal con Él.
En los momentos de tristeza, él es nuestro Consolador.
En los momentos de felicidad, celebra con nosotros. Cuando enfrentamos
desafíos, él es nuestro ánimo. En momentos de incertidumbre, él es nuestra
firme esperanza. Independientemente de la temporada a la que nos enfrentemos,
podemos estar seguros de que no estamos solos. Él está trabajando activamente
en nosotros a través de cada circunstancia. A veces eso puede significar que, al
igual que muchos árboles perderán sus hojas antes de la novedad de la
primavera, muchas veces Dios nos vaciará del peso que estamos cargando para dar
paso a una nueva belleza. Deja tus preocupaciones en las manos de Dios y confía
en que Él te llevará a través de las estaciones.
Oración sugerida: Querido Dios, tu creación es
perfectamente hermosa y constantemente nos enseña más sobre ti. Al igual que
controlas todo lo que sucede en nuestro universo, te pido que me ayudes a
confiar en que tienes el control de mi vida y de todo lo que sucede en ella.
Gracias por Tu gran fidelidad en cada temporada. En el amoroso nombre de Jesús,
Amén.
Lamentaciones
3:22-23 (NVI).
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