Encuentros Diarios
Noviembre 20, 2024
1. Ser digno de confianza
"El que es honrado en
lo poco también lo será en lo mucho; y el que no es integro en lo poco tampoco
lo será en lo mucho.”1
Una joven estaba tomando los
rayos del sol en una playa de Florida cuando un niño pequeño en sus bañadores,
llevando una toalla, se acercó a ella y le preguntó: "¿Crees en
Dios?" Ella se sorprendió por la pregunta, pero ella respondió: "sí,
lo hago". Luego le preguntó: "¿Vas a la iglesia todos los
domingos?" Una vez más, su respuesta fue "¡Sí!"
Luego preguntó: "¿Lees
tu Biblia y oras todos los días?" Una vez más, ella dijo: "¡Sí!"
A estas alturas su curiosidad crecía. El niño suspiró con alivio y dijo:
"¿Me guardas mi peseta mientras voy a nadar?"
Esta historia puede hacernos
reír, pero es una simple ilustración de una responsabilidad importante que
tenemos como personas y, aun mas, como cristianos. La confiabilidad es algo de
lo que carece nuestra sociedad actual. Parecería que muchas personas, en
general, solo están buscando su propio beneficio. ¡Casi es una agradable
sorpresa cuando encuentras a una persona o empresa que es verdaderamente
confiable!
Como cristianos, sin
embargo, es importante recordar que hay mucho trabajo por hacer para el Reino
de Dios. Él está buscando personas confiables a las que confiar este trabajo,
pero si demostramos que no se nos puede confiar en las pequeñas tareas
cotidianas que encontramos, ¿cómo puede usarnos para hacer cosas más grandes?
Esto es especialmente cierto cuando se trata de nuestras relaciones con los
demás. Si no podemos ser un lugar seguro y sin prejuicios para que otros vengan
y compartan sus luchas y alegrías, perdemos la oportunidad de ser "como
Jesús" para ellos. En lugar de ser una conexión atractiva para una relación
personal con Jesús, nuestra falta de confiabilidad puede alejar a otros de
conocer al Único que puede hacerlos completos.
Sea lo que sea que venga hoy,
que los demás sepan que somos cristianos por nuestra bondad y confiabilidad. En
las tareas pequeñas o grandes, que todo lo que hagamos traiga gloria a Dios.
Oración sugerida: Querido
Dios, quiero seguir tu ejemplo de honestidad, amor y verdad en todo lo que
hago. Ayúdame a trabajar para el beneficio de los demás, y no solo para el mío.
Permite que mi vida sea un puente que conecte a otros contigo, para que puedan
experimentar la esperanza, la paz y la alegría que provienen de una amistad contigo.
Gracias por escuchar y contestar mi oración. En el nombre de Jesús, amén.
Lucas 16:10 (NVI).
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